Se emplean para solucionar problemas de esterilidad tanto de la mujer como del hombre, es decir, en aquellos casos en que una pareja no puede tener hijos.
Las más importantes son:
- Inseminación artificial: se introducen los espermatozoides del hombre directamente en el útero de la mujer.
- Fecundación in vitro: se extraen óvulos de los ovarios de la mujer y espermatozoides del hombre. Se hace la fecundación en un laboratorio y los embriones obtenidos se implantan en el útero de la mujer.
- Inyección intracitoplasmática de espermatozoides: los espermatozoides previamente seleccionados se inyectan directamente en el interior de los óvulos en un laboratorio. Posteriormente los embriones obtenidos se implantan en el útero de
la mujer.